Cuando deje de escribir, sentí que estaba sanando.
Me pregunto si yo era la llama en el pabilo
o la cera que se consumia lentamente.
Quizás simplemente fui la chica que prendió el fuego,
que se quemo con el sueño de brillar.
Cuando deje de seguirte comencé a sanar,
y fue triste porque pense que esta vez sería diferente,
pero no devolvías los mensajes,
e ignorabas los mensajes,
supe que yo no era importante.
Mientras mis sentimientos se desbordaban,
tú cambiabas los temas,
no te culpo,
no puedo,
fui yo la que encendió el pabilo y se equivoco.
Desde diciembre lo intente,
hasta Marzo lo deje.
Es la primera vez en mi vida que no espero,
porque los mensajes fueron claros.
Porque comencé a sanar cuando me aleje de ti.
Quisiera estar por siempre enferma,
pero no me sirve si tú no eres la cura.
Cuando deje de escribir y tú igual,
comence a sanar.
Esto es lo último que te escribo,
porque finalmente estoy sanando.
Me pregunto si yo era la llama en el pabilo
o la cera que se consumia lentamente.
Quizás simplemente fui la chica que prendió el fuego,
que se quemo con el sueño de brillar.
Cuando deje de seguirte comencé a sanar,
y fue triste porque pense que esta vez sería diferente,
pero no devolvías los mensajes,
e ignorabas los mensajes,
supe que yo no era importante.
Mientras mis sentimientos se desbordaban,
tú cambiabas los temas,
no te culpo,
no puedo,
fui yo la que encendió el pabilo y se equivoco.
Desde diciembre lo intente,
hasta Marzo lo deje.
Es la primera vez en mi vida que no espero,
porque los mensajes fueron claros.
Porque comencé a sanar cuando me aleje de ti.
Quisiera estar por siempre enferma,
pero no me sirve si tú no eres la cura.
Cuando deje de escribir y tú igual,
comence a sanar.
Esto es lo último que te escribo,
porque finalmente estoy sanando.
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