Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2011

Te libero, amor.

Que bueno pudo ser decirte que eras el primero en hospedar este músculo que se encarga de bombear sangre a mi organismo… pero no fue así.  No te culpo, pues aun cuando ante mis ojos tus decisiones no sean las mejores, tampoco creo ser la mejor decisión que tomes.  Menciono que a través de un largo año no pude borrar tu rostro de mi mente, pero ahora sé que no eres la clase de persona que busco.  Tal vez nunca logre conocerte, tal vez nunca descubra la verdadera persona que eres, pero tal vez yo no seré la encargada de descubrir lo que escondes, así que hoy comienzo mi silenciosa despedida.  Nunca te tendre, nunca vere tu mirada llena de amor, y nunca te escuchare susurrando que me amas.  Desde que te mire supe que esto terminaría así, siempre pasa y no me quejo.  Hoy te libero, y me libero a mi misma de tu recuerdo. El proceso no será rápido pero tampoco imposible, a fin de cuentas tu nunca me conociste y yo sólo te he observado en secreto. 

Una mirada y mi corazón le pertenece.

Desde que  sin querer puse mi mirada atenta en ti todo cambio. Te observe por varios segundos o minutos, no recuerdo pues el tiempo no existió al ver tu dulce sonrisa. Mi corazón comenzó a acelerarse cada vez que te veía llegar, sabes ayer después de meses me dijiste una simple palabra que para mi fue todo, y hoy estabas frente a mi sonriendo, atendiendo a lo que yo decía y… simplemente no pude mirarte, porque me apena verte tan cerca, es estúpido lo sé, pero tal vez es un síntoma de eso que llaman amor. Hoy, también te vi atentamente y casi caigo pues tu belleza es sin igual, y hoy recorrí con mi mirada cada contorno de tu dulce rostro. Eres increíble, más sé que soy una loca por mirarte así, y sé que jamas me veras como yo a ti. Sólo dejame decirte que: Eres hermosa.    

Su mirada...

Realmente me hundiría en tu mirada por siempre, realmente nunca tendría miedo a mirar tus ojos, aquellas delicadas pupilas nunca me han mirado, aquellos delicados cristales, ventanas a tu ser, tal vez nunca me miren, tal vez algún día en alguno de aquellos locos sueños,  tus hermosas esmeraldas choquen con mis  ilusionados ojos, pero no significara que sea la dueña de su brillo,  ni que grabaran mi imagen en tu mente, y así lo vuelvo a repetir… podría quedarme recostada en el verde pasto, viendo el color de este para recordar tus delicados ojos   una eternidad. .