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Una vela morada.

En una vela con olor a lavanda coloque todos mis deseos de año nuevo. Al lado yacía un collar con un amuleto que atrae ángeles. Esperaba que mis demonios se consumieran en la flama de aquella pequeña vela, pero creo que planean estar conmigo un año más. Ellos se esconden entre mis sabanas y los recuerdos del 2011. Juegan por mi recamara y ruedan en el frío piso. Cuando escucho música que me inspira, un demonio azul me abraza y las lagrimas ruedan por mis mejillas. Él es hermoso cuando llora a mi lado mientras mi mente se llena de miles de ideas creativas que con la luz del sol se esfuman.

En esa redonda vela, deposité mi más grande deseo, un año más, muchos años más, al lado de las personas que amo. 6 meses más soportando la tormenta. Por el triunfo en mi carrera, porque todo vaya de acuerdo al plan, pero creo que el plan está cambiando, quizás me estoy perdiendo justo al final del camino. Espero la luz de la vela me guié. 


Esta noche quiero dormir tranquila.


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